MAS QUE AMIGOS, SOMOS HERMANOS

Una día soleado un amigo y yo decidimos coger el yate de mi padre he ir a dar una vuelta por el mar, estábamos en alta mar y los peces no pescaba, estábamos aburridos, entonces mi amigo me dijo, si hacíamos una apuesta, yo le dije que según como seria la apuesta, entonces me la explicó, se trataba de aguantar el máximo tiempo bajo el agua sin respirar y el que perdiese se tenia que rapar el pelo, yo no estaba muy decidido porque mi amigo es nadador y seguro que ganaría la apuesta, en fin no teníamos otra cosa que hacer y acepte la apuesta. El primero en meterse en el agua fui yo solo aguante 1 minuto y dos segundos, cuando salí del agua ya sabia que había perdido, se metió mi amigo en el agua y me asombré porque solo aguantó 55 segundos, cuando salio del agua no se lo podía cree que había perdido la apuesta, entonces cogí la maquina y le dije que se sentara que tenia que cumplir la apuesta, entonces el me dijo que todo había sido una broma y que lo de la apuesta era una broma, yo le dije que una apuesta es una apuesta y sin que se diera cuenta le corte un mechón de pelo con las tijeras, entonces mi amigo se derrumbo porque llevaba dos años sin cortarse el pelo, empezó a llorar y yo empecé a cortarle el pelo primero con las tijeras y luego con la maquina al cero, cuando termine mi amigo seguía llorando, le puse un espejo delante y no dejaba de llorar. Al rato al ver que no paraba de llorar decidí darle la maquina de cortar el pelo y le dije raparme la cabeza, entonces dejo de llorar y me rapo, después nos dimos un baño y nos dirigimos al puerto deportivo con el yate. Desde entonces somos más que amigos, somos hermanos.