martes, 27 de octubre de 2009

por fin rapado By buzzedbob

Esta historia pasó hace unos cuantos años, tendría yo unos 16, y por aquella época mucha gente empezaba a llevar ya el pelo rapado. Yo siempre me sentí atraído hacia este tipo de corte, y siempre me había tentado la idea de raparme la cabeza, pero nunca encontraba el momento de hacerlo, no me atrevía porque no sabía cómo me quedaría. Tengo el pelo oscuro y muy denso, y además me crece bastante rápido.

Siempre me hacia el mismo corte, y siempre en la barbería de mi barrio. A principios de mes, cuando el barbero me preguntaba cómo lo quería, la respuesta siempre era la misma, al dos por detrás y por los lados y con tijera lo de arriba. Aunque me pasaba el dos por la nuca, nunca lo consideré muy corto porque al tener tanto pelo no se veía la cabeza, consideraba que un verdadero rapado es aquel en el que el pelo es tan corto que se ve la cabeza.

Llevaba un par de cortes tanteando a mi barbero, sobre cómo me quedaría el pelo rapado, pero nunca me acababa de decidir, lo máximo que arriesgue en la última visita fue a decirle que probará a pasarme la maquina también por arriba, pero algo más largo, a lo cual es respondió pasándome el cuatro por arriba. Evidentemente no quedé satisfecho, para mí no era un verdadero rapado, pero ya había sentido por primera vez la maquina pasando por toda la cabeza.

Decidí que esta vez seria la definitiva, la de un verdadero rapado. Era viernes por la tarde, y me dirigí a mi barbería de siempre nervioso, sabiendo que no podía dudar o volvería a salir con el mismo corte de siempre. Cuando llegue justo salía el último cliente, directamente entré y me senté en el sillón. El barbero me dijo que si lo quería como siempre,le dije que no, que esta vez lo quería más corto para que me durara mas para el verano,y de carrerilla solté la frase que tantas veces había ensayado y nunca antes me atreví a pronunciar, pásame el uno por detrás y por los lados y el dos por arriba. El barbero ni se inmuto, siempre pensé que me diría algo o preguntaría extrañado, pero no lo hizo. Sin hablar cogió la maquinilla, le puso el peine y empezó a pasármela por la nuca de abajo hacia arriba. Empezó por la parte de atrás, por lo que yo no podía ver nada, y cada vez me estaba más nervioso esperando el resultado; hasta que por fin dio la primera pasada por el lateral. En este momento pude comprobar que realmente estaba quedando bien rapado, se me veía toda la cabeza, cosa que nunca antes había pasado.Cuando acabó con el uno cambio el peine al dos y empezó a raparme la parte de arriba, desde la frente hacia atrás, en tres pasadas me dejó la cabeza bien rapadita.

No abrí la boca en todo el corte.Estaba completamente rapado, la verdad estaba entre impactado y asustado, el cambio era bastante radical. De pronto el barbero abrió la boca por primera vez durante todo el corte,si quieres te paso la maquina al cero por detrás y por los lados, creo que te va a quedar mejor si se diferencia más de la parte de arriba. Perfecto, le dije; no podía creer lo que estaba diciendo. El barbero cogió la maquina, y esta vez sin peine empezó a pasarla de abajo hacia arriba, sentía el metal directamente contra mi piel, una sensación que no quería que terminará. Listo, por fin te atreviste y te vas con un buen high and tight, me dijo. Siempre pensé que un corte así te quedaría muy bien, pero nunca parecía que te acabaras de decidir por el rapado,por eso hoy cuando lo has pedido he preferido actuar antes de que te arrepintieras, y lo de pasarte el cero me pareció muy apropiado ya que estábamos, sabía que no te opondrías. Le di las gracias y me fui, con la cabeza peladita como siempre había querido, y sin poder parar de pasarme la mano por ella y sentir el poco pelo que quedaba. Después de este vinieron otros cortes militares que ya les contaré.

No hay comentarios: